El día 29/09/12 llegó a Orihuela el nuevo Obispo llamado Jesús. Nosotros fuimos a verle, tuvimos que esperar al sol un buen rato para estar en primera fila. Al rato, como teníamos los altavoces al lado nuestro, empezamos a escuchar los aplausos de la gente al obispo. De repente, todo el mundo se calló, y, en el altavoz se oyó “¿tengo que tocar o no?”. Tenía que tocar la puerta de la Antigua Muralla. Entonces todo empezó:
“Tac, Tac, Tac”
“¿Quién va?”
“El Señor Obispo que entra en la ciudad de Orrihuela”.
Entonces abrieron las puertas y vimos al nuevo Obispo. Para mí, un obispo es una gran persona, porque en toda una Comunidad, él y con ayuda tiene que enseñar a todos lo que hizo Jesús en toda su vida, lo que hicieron los apóstoles después de que Jesús resucitara, etc. Y cuando se jubile como el antiguo obispo Rafael, llegará un nuevo obispo y todo vuelve a empezar.